Vivir siendo mujer colombiana o latinoamericana debe trascender a espacios seguros y libres, de allí que reivindicar nuestra lucha por recuperar aquello que nos ha sido negado debe ser un compromiso de cada una con el objetivo de revolver esas aguas profundas del patriarcado y traer a la vida nuevas formas de coexistir.
Las mariposas siguen volando: 25N una lucha incesante
